Este refrán sugiere que a las personas que parecen menos necesitadas («gordo mendigo») se les ofrece menos ayuda o caridad («pocos dan zatico»). Implica que la percepción de necesidad influye en la disposición de los demás a ayudar.
Este refrán sugiere que a las personas que parecen menos necesitadas («gordo mendigo») se les ofrece menos ayuda o caridad («pocos dan zatico»). Implica que la percepción de necesidad influye en la disposición de los demás a ayudar.