Este refrán sugiere que después de comer algo salado o fuerte, como el queso, es bueno beber vino («darle el beso a la bota», donde se guarda el vino). Es una recomendación sobre cómo disfrutar mejor de ciertos alimentos o bebidas.
Este refrán sugiere que después de comer algo salado o fuerte, como el queso, es bueno beber vino («darle el beso a la bota», donde se guarda el vino). Es una recomendación sobre cómo disfrutar mejor de ciertos alimentos o bebidas.