Cuando el tabernero vende la bota, o sabe a la pez o está rota.: Este refrán advierte sobre la calidad de un producto, en este caso, la bebida servida en una bota de cuero. Sugiere que si el tabernero vende la bota, es probable que la bebida no sea de buena calidad y pueda tener un sabor desagradable o que la bota esté dañada.