«Domingo de Ramos, el que no estrena no tiene manos»: Este refrán hace referencia a la tradición de estrenar ropa nueva en el Domingo de Ramos, que marca el inicio de la Semana Santa. Se sugiere que aquellos que no estrenan ropa en este día pueden ser vistos como personas sin manos, en el sentido de que no están dispuestos a gastar o a participar en la celebración.