«La cabra coja no quiere siesta, y si la quiere caro le cuesta»: Este refrán juega con la idea de que una cabra coja no debería querer o necesitar descanso, pero si lo desea, será difícil de conseguir debido a su condición coja. Puede aplicarse a personas que desean cosas que son difíciles de lograr debido a sus limitaciones o circunstancias.