La sabiduría de generaciones se encapsula en breves frases que nos guían a través de la complejidad de la existencia. En «Refranes de la Vida», exploramos dichos atemporales que nos ofrecen perspectiva, consuelo y motivación. Estos refranes, destilados de la experiencia colectiva, actúan como faros en nuestro viaje diario.

Aprender de los Refranes

Cada refrán es una ventana a una verdad universal, ofreciendo lecciones de vida que son relevantes hoy como lo fueron hace siglos. Aquí, desglosamos el significado profundo detrás de cada dicho popular y cómo aplicar esta sabiduría ancestral en el contexto moderno.

Compartir la Sabiduría

Creemos que la sabiduría debe ser compartida. Invitamos a nuestros visitantes a reflexionar sobre estos refranes y cómo se aplican en sus propias vidas. Comparte tus experiencias y cómo un refrán en particular te ha impactado o guiado.

Un Espacio para Explorar y Crecer

«Refranes de la Vida» es más que una colección de dichos; es una comunidad de individuos que buscan entender mejor el mundo y su lugar en él. Sumérgete en nuestras historias, descubre nuevas perspectivas y enriquece tu vida con la sabiduría del pasado.

Únete a nosotros en esta exploración de la sabiduría tradicional. Navega por nuestra colección, descubre los tesoros ocultos de la sabiduría popular y lleva contigo palabras que han soportado la prueba del tiempo.


  • A caballo regalado, no le mires el dentado.
  • A cada cerdo le llega su San Martín.
  • A casa de herrero, cuchillo de palo.
  • A Dios rogando y con el mazo dando.
  • A donde fueres, haz lo que vieres.
  • A falta de pan, buenas son tortas.
  • A grandes males, grandes remedios.
  • A lo hecho, pecho.
  • A mal tiempo, buena cara.
  • A quien madruga, Dios le ayuda.
  • A río revuelto, ganancia de pescadores.
  • A quien siembra vientos, recoge tempestades.
  • A palabras necias, oídos sordos.
  • A perro flaco, todo son pulgas.
  • A perro viejo, no hay quien lo engañe.
  • A rey muerto, rey puesto.
  • Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.
  • Cada loco con su tema.
  • Cada maestrillo tiene su librillo.
  • Cada uno en su casa y Dios en la de todos.
  • Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente.
  • Cargar con el muerto.
  • Cosecha lo que siembres.
  • Cría cuervos y te sacarán los ojos.
  • Cuanto más alto se sube, mayor es la caída.
  • De tal palo, tal astilla.
  • Del dicho al hecho hay mucho trecho.
  • Después de la tempestad, viene la calma.
  • Dime con quién andas y te diré quién eres.
  • Dios aprieta pero no ahoga.
  • El amor todo lo puede.
  • El hábito no hace al monje.
  • El que mucho abarca, poco aprieta.
  • El que no llora, no mama.
  • El que no quiso cuando pudo, no podrá cuando quiera.
  • El que siembra vientos, recoge tempestades.
  • El que tiene tienda que la atienda, y sino que la venda.
  • El que tiene tienda que la atienda.
  • El que mucho abarca, poco aprieta.
  • En boca cerrada no entran moscas.
  • En casa de herrero, cuchillo de palo.
  • En martes, ni te cases ni te embarques.
  • En todas partes cuecen habas.
  • Más vale tarde que nunca.
  • Más vale prevenir que lamentar.
  • No hay mal que por bien no venga.
  • No hay peor ciego que el que no quiere ver.
  • No hay que escupir al cielo.
  • No hay que hablar por hablar.
  • No hay que vender la piel del oso antes de cazarlo.
  • No por mucho madrugar amanece más temprano.
  • No se puede estar en misa y repicando.
  • No se puede servir a dos señores.
  • No todo el monte es orégano.
  • Ojos que no ven, corazón que no siente.
  • Padre no hay más que uno.
  • Pan con pan, comida de tontos.
  • Poco a poco se anda lejos.
  • Por la boca muere el pez.
  • Quien algo quiere, algo le cuesta.
  • Quien busca, encuentra.
  • Quien con niños se acuesta, mojado amanece.
  • Quien mucho abarca, poco aprieta.
  • Quien no llora, no mama.
  • Quien ríe último, ríe mejor.
  • Quien tiene boca se equivoca.
  • Quien tiene tienda que la atienda.
  • Quien va a Sevilla, pierde su silla.
  • Quien mucho abarca, poco aprieta.
  • Quien mucho abarca, poco aprieta.
  • Quien mucho corre, pronto para.
  • Quien mucho duerme, poco aprende.
  • Quien mucho tiene, mucho teme.
  • Quien no llora, no mama.
  • Quien no se arriesga, no gana.
  • Quien no se aventura, no cruza el río.
  • Quien no se atreve, no cruza el río.
  • Quien no tiene cabeza, tiene pies.
  • Quien no tiene perro, caza con gato.
  • Quien no vive para servir, no sirve para vivir.
  • Quien presta a un amigo, pierde el dinero y el amigo.
  • Quien quiera peces, que se moje el culo.
  • Quien quita la ocasión, quita el peligro.
  • Quien siembra vientos, recoge tempestades.
  • Quien tiene boca, se equivoca.
  • Quien mucho abarca, poco aprieta.
  • Quien mucho corre, pronto para.
  • Quien mucho duerme, poco aprende.
  • Quien mucho tiene, mucho teme.
  • Quien no llora, no mama.
  • Quien no se arriesga, no gana.
  • Quien no se aventura, no cruza el río.
  • Quien no se atreve, no cruza el río.
  • Quien no tiene cabeza, tiene pies.
  • Quien no tiene perro, caza con gato.
  • Quien no vive para servir, no sirve para vivir.
  • Quien presta a un amigo, pierde el dinero y el amigo.
  • Quien quiera peces, que se moje el culo.
  • Quien quita la ocasión, quita el peligro.
  • Quien siembra vientos, recoge tempestades.
  • Quien tiene boca, se equivoca.