UNA hora duerme el gallo, DOS el caballo, TRES el santo, CUATRO el que no es tanto, CINCO el capuchino, SEIS el peregrino, SIETE el caminante, OCHO el estudiante, NUEVE el caballero, DIEZ el pordiosero, ONCE el muchacho y DOCE el borracho: Este refrán es una forma de recordar cuántas horas duerme cada tipo de persona o personaje durante la noche. A medida que se avanza en el día, la cantidad de horas de sueño disminuye gradualmente, con el borracho durmiendo más horas al final del día. Es una especie de juego mnemotécnico para recordar las horas aproximadas de sueño de diferentes personas.